Imagen de Khusen Rustamov en Pixabay
El Poema Adeudado… en
el Día de tu Cumpleaños, Esposa mía.
El Llanto de Tu Desnudez
Me miras fijamente al
corazón
y mi corazón se fija en
tus ojos,
¡cómo dulcemente se
desarropa tu cuerpo!,
al igual que con
timidez lo hace tu alma.
Así, se inquietan mis lágrimas
de verano,
así, se desbordan mis
trémulas entrañas.
Me sorprendes con tu
belleza
Y pienso con incrédula
presencia:
«¡¿cómo estoy vivo aún
para ver tu desnudez?!».
Le doy gracias a Dios
que existas, y que,
al caer tus vestidos al
suelo, prorrumpa en llanto eterno;
ahí, en un instante, el
Señor me dicta al oído que te amo.
Autor: